Detrás del mostrador

Sana Distancia

Salud, respeto y comodidad

ESPACIO

Es común que, al estar en un sitio donde existe saturación de personas, por ejemplo, en el transporte público o un elevador, de inmediato se perciba cierta incomodidad, y esto se debe a que las personas sienten que han invadido su espacio vital, aquel en el que se sienten seguras y cómodas, donde otros individuos no pueden entrar, a menos que obtengan el consentimiento de quien siente invadida su zona de confort.

VARIABLE

El espacio vital que necesita cada persona es una especie de burbuja porque es flexible, ya que se expande y contrae continuamente, dependiendo de la situación en la que se encuentre y con qué individuo se está interactuando.

PROXÉMICA

Esta disciplina fue desarrollada por el antropólogo estadounidense Edward T. Hall (1914-2009), quien dedujo que la distancia física que guardan las personas se relaciona con la interacción social que realizan; posteriormente, las clasificó en cuatro categorías:

Íntima (entre 15 y 45 cm). Reservada a personas con las que se goza de mayor afecto y confianza; generalmente para quienes tienen profunda relación sentimental o emocional como familiares, amigos íntimos y parejas. Esta cercanía permite que la comunicación se pueda realizar mediante mirada, tacto o roce; por lo que en estas circunstancias son frecuentes abrazos, besos y caricias.

Personal (desde 46 hasta 120 cm). Es la que existe al estirar el brazo. Este tipo de espacio es el que se mantiene durante ciertas reuniones de trabajo y conversaciones entre compañeros, vecinos o amigos lejanos, lo cual comúnmente implica poco contacto físico, por ejemplo, un saludo amistoso de mano o un beso en la mejilla.

Social (se puede incrementar hasta 360 cm). Se pone en práctica con extraños, es la que se mantiene cuando se interactúa con desconocidos y/o personas con las que no hay ningún tipo de relación amistosa, ni contacto físico cercano.

Pública (se extiende más allá de los 360 cm). Es la ideal para dirigirse a un grupo de personas desde un estrado. Se da en conferencias, coloquios frente a un auditorio, presentaciones de trabajo y charlas con los empleados.

ENTORNO

El Dr. Hall también identificó cuatro espacios en donde se aplican este tipo de distancias:

Pública. No tiene ninguna función y es aquel donde no existe convivencia, por ejemplo, cuando la gente camina en la calle.

Habitual. Tiene carácter público dado que el espacio es libre, pero la distancia física entre dos personas puede verse reducida porque comparten un espacio, pero no tienen ninguna relación, por ejemplo, en el transporte público.

Interacción. Aparece en lugares donde cada uno de los interlocutores desempeña un papel determinado, y ambos reconocen el sitio preciso que les corresponde.

Corporal. Se refiere al espacio personal de carácter íntimo, únicamente permitido a personas con las que se goza de gran cercanía, y es infranqueable para los demás. Por ello, cuando alguien des conocido y/o que no cuenta con la suficiente confianza, toca a alguien, se trata de invasión grave al espacio vital personal; incluso, sentarse demasiado cerca de un individuo puede ser una agresión a su "burbuja", situación que suele tener enorme impacto sobre la gente.

¿DÓNDE ESTÁS?

De acuerdo a las estimaciones elaboradas por el Dr. Hall, debes mantener distancia hacia tus clientes entre la categoría personal y social, dentro del espacio de interacción. Esto significa que respetas la distancia íntima y corporal del consumidor, pero te mantienes los suficientemente cerca para atenderlo, en una zona donde cada uno reconoce el papel que está desempeñando.

VENTAJAS

Cuando te ubicas en el punto exacto donde debes estar para atender a tus clientes, logras obtener los siguientes beneficios:

Confortable. Ambos se sienten bien, porque ocupan el lugar que les corresponde durante la interacción, así que el consumidor tendrá mejor ánimo para adquirir productos que necesita; por otra parte, al sentirte cómodo, te esfuerzas para brindarle la mejor atención posible durante su visita.

Precaución. Además del uso de cubrebocas y careta, la “sana” distancia es otra medida clave para reducir el riesgo de contagio de diversos tipos de virus respiratorios, así que mantenerla demuestra que ambos interlocutores se preocupan por el bienestar de la otra persona.

Sin acoso. Si te aproximas demasiado o el cliente hace lo mismo, él o tú pueden sentirse hostigados y sumamente inquietos, crean do un entorno negativo que dificulta la interacción; esta situación se evita simplemente guardando la distancia prudente.

Lejanía. Es el caso opuesto al anterior, pero igualmente contrario al objetivo de vender, pues el consumidor puede pensar que el excesivo distanciamiento es porque no te interesa atenderlo, así que debes disminuir la separación al punto perfecto en que ambos se sientan cómodos.

SIEMPRE

Las propuestas del Dr. Hall varían de acuerdo a la cultura; por ejemplo, en América Latina la gente tiende a sentirse cómoda cerca de los demás, así que su espacio vital es menor, mientras que en las sociedades nórdicas y orientales es todo lo contrario. Sin embargo, en ningún ámbito desaparece ese espacio que requiere el ser humano para sentirse protegido y, por tanto, en todo momento se debe respetar.